Hay un dicho popular valenciano que dice así “la faena del matalafer, fer i desfer”. Pues bien, con esta definición y cambiando su realidad se puede decir que la actual legislatura del Sr. Ros y sus socios de gobierno Compromís i Guanyant se podría denominar como la del “matalafer”, pero con una pequeña modificación el “gobierno dels matalafers de no fer i desfer”.
Tras 16 meses de desgobierno, postureo y falta de ideas, los torrentinos hemos visto casi de todo en este tripartito.
Y así, como buenos “matalafers” se han dedicado a deshacer el nombre del Auditori, para que, sin consenso, ni escuchar a los ciudadanos, se les otorgue un nuevo nombre. Nombre que además nos costará a todos los torrentinos y saldrá de nuestros bolsillos tener un cambio “tan digno”.
En cuestión de obras, estos “matalafers” demuestran ser altamente habilidosos y en pocos meses Torrent ha sido levantada, asfaltada y vuelta a levantar. Casos como la calle Santo Tomás, que ni la obra de El Escorial dio tanto para hablar. O lo más vergonzoso, como las obras de las calles Santa Ana y adyacentes, se han visto paralizadas por la Consellería por dos veces. Simplemente porque el ayuntamiento no cumple con la normativa, la misma que hace cumplir a los ciudadanos cuando tienen que ejecutar una obra en el centro histórico. Es como “el Juan Palomo, yo me lo guiso y me lo como, pero a ti te doy lomo”.
Y estos “matalafers” en lugar de crear empleo suben el sueldo en 130.000 euros a un departamento de urbanismo alegando el aumento de licencias. Y los ciudadanos se preguntan si ese dinero no estaría mejor empleado generando empleo en todo el pueblo.
Pero en materias de empleo, estos “matalafers” se llevan un premio. Hacen un curso de formación para parados de larga duración, con el compromiso de reinserción, es decir de buscarles trabajo. Pues algo tan sencillo para ellos “hay que deshacer” y así ni buscan el trabajo, ni emplean y además pierden parte de la subvención.
En materia ideológica, estos “matalafers” son especialistas. Ellos dicen “que hay que enseñar a la ciudadanía”, y así nos montan actos políticos pancatalanistas la víspera del 9 d octubre, y para que nadie diga o se hable, el alcalde que es el que lo propone, se esconde en una calle para ofrecer su cara más “Senyera” a aquellos que lo interpelan.
Y por último y, ahora que llegan los presupuestos y las ordenanzas, en los años de gobierno popular, el IBI se bajaba. Pues no, ahora no, el IBI no se baja. Según ellos se congela. Queda bien en la calle, pero cuando a usted le llega el recibo, su cara se congelará al ver que paga más, simplemente por no aplicar la bajada del tipo municipal.
Y así de esta forma se resume la gestión de este equipo de gobierno que se dedica a la digna profesión de MATALAFERS.
